Este proyecto se desarrolló gracias al financiamiento del Ministerio Federal para el Desarrollo Económico y la Cooperación (BMZ) y se implementó en el contexto entre la Guerra de Rusia y Ucrania, la cual afectó al sector productor de banano en Ecuador. El objetivo de esta iniciativa fue fortalecer las capacidades de las y los productores en materia de productividad y en gestión de finca bajo los estándares de sostenibilidad y buenas prácticas agrícolas para mitigar los efectos de la guerra en el sector.
Esto se llevó a cabo mediante Escuelas de Campo y la aplicación de evaluaciones que permitan mejorar los procesos de producción en las plantaciones y las plantas empacadoras, las cuales permiten a las y los productores y a las Asociaciones que puedan acceder a varias certificaciones con un alto estándar de calidad como por ejemplo GlobalG.A.P.