Bolivia es uno de los países más afectados por los impactos hidrológicos inducidos por el cambio climático. Por ello, el gobierno nacional, los gobiernos departamentales y los municipios están diseñando estrategias de adaptación nacionales, sectoriales y subnacionales y, en ese contexto, necesitan información fiable sobre las condiciones climáticas previstas a nivel regional, así como evaluaciones específicas respecto a la conveniencia de las inversiones planificadas para la adaptación. Para responder a esta necesidad, la GIZ y el Instituto de Potsdam para la Investigación del Impacto del Cambio Climático (PIK) han desarrollado un estudio de riesgo climático centrado en las cuencas de los ríos Guadalquivir, en Tarija, y San Martín y Paraguá, en Santa Cruz. |