Los parques y jardines públicos intervienen directamente en el equilibrio ambiental y social de las ciudades. De esta manera contribuyen a una mejor calidad de vida de las personas. Sin embargo, debido al crecimiento acelerado y a la densificación por los asentamientos humanos, cada vez existe menos espacios verdes en las ciudades.
La planificación urbana de los últimos años ha desplazado las áreas verdes por “el ladrillo
y el cemento”. Esto reduce un espacio vital necesario para la salud, el recreo, el disfrute y
confort de sus ciudadanas/os.
Invertir en una mayor dotación de espacios verdes y de calidad en las ciudades conduce a
incorporar medidas de sostenibilidad, que permitan usar eficientemente los recursos, en
particular el agua, para su mantenimiento.
En ese sentido, los municipios de Tarija y Yacuiba implementaron un modelo de jardinería
sostenible. La administración pública1 incorporó principios ambientales de manejo de las
zonas verdes: desde el diseño, la ejecución, el mantenimiento y la gestión.
El Programa PERIAGUA2 ha contribuido a que Tarija y Yacuiba incluyan, en su reglamentación municipal, criterios de sostenibilidad del agua en el diseño, remodelación y mantenimiento de parques, jardines y zonas verdes.